El IFT da voz y foro a medios comunitarios indígenas y afromexicanos

Con el propósito de ofrecer espacios de diálogo y contribuir a erradicar los rezagos de los grupos vulnerables del país, el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) ha organizado foros con medios comunitarios para intercambiar ideas sobre su rol de difusores, en el marco de una mayor inclusión social en beneficio de esos grupos, entre los que se incluyen a los pueblos afromexicanos.

Los días 7 y 8 de agosto el IFT organizó el Tercer Foro Internacional de Medios Comunitarios Indígenas y Afromexicanos, que se dieron cita más de 100 concesionarios en el pueblo mágico de Pátzcuaro, Michoacán, acompañados de diversas entidades públicas, Universidades y Organizaciones de la Sociedad Civil (OSC).

A nivel internacional, se contó con la presencia de algunos países hispanohablantes, como Ecuador, Colombia, España, Argentina, Uruguay, Guatemala y Chile, así como de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO).

De acuerdo con el IFT, el objetivo de estos foros es “contar con un espacio de diálogo entre personas que operan radios en comunidades o pueblos indígenas, así como academia, sociedad civil y diferentes actores”, y entre todos, compartir experiencias que permitan mejorar los marcos regulatorios que los regulan y su simplificación, labor que compete directamente al instituto autónomo, en su función de supervisor.

Sin embargo, esta iniciativa tiene un impacto directo sobre aspectos sociales y culturales de enorme importancia para el país, dado que estamos hablando de una afirmación de derechos comunitarios de grupos marginados de la sociedad mexicana. Y por este motivo, el foro se desarrolló en cuatro ejes principales: sostenibilidad, identidad, derechos humanos e inclusión.

Uno de los aspectos que más resaltó en el evento de este año fue la presencia de Voces Afromexicanas, la primera radiodifusora afromexicana que obtuvo recientemente la concesión por parte del IFT. Se trata de un proyecto dirigido por una organización de mujeres de Oaxaca, Coconatu Colectiva de la Costa de Oaxaca Na a Tundaa, A.C., ubicadas en San Marquitos, dentro de la localidad de Villa de Tututepec, Oaxaca.

Su estación de radio se escucha en la frecuencia 107.3 FM, con cobertura de 24 kilómetros a la redonda, y de acuerdo con las líderes del proyecto, se buscan difundir los valores de este segmento poblacional, en especial, del pueblo afromixteco. De esta manera, el IFT marcó un hito al sumarse al proceso de reconocimiento de los pueblos afromexicanos.

No obstante, durante el foro de Pátzcuaro los distintos medios comunitarios pusieron en entredicho el pluralismo jurídico de las instituciones del Estado mexicano y la poca coordinación de sus usos y costumbres con el derecho nacional, quedando en evidencia el no reconocimiento de la autonomía política de los pueblos desde un Estado que dice que oye, pero no escucha, imponiendo un modelo de comunicación política que, lejos de considerar el pluralismo, simula reconocer los derechos.

En concreto, las críticas se volcaron hacia el Instituto Nacional Electoral (INE), por controversias relacionadas con la transmisión de spots de las campañas de los distintos partidos políticos durante el proceso electoral de este año, mismas que algunos medios y radiodifusoras comunitarias no transmitieron por no estar traducidos en determinadas lenguas y dialectos indígenas.

Por su parte, el IFT ha estado abierto a escuchar, y en los últimos años avanza en la implementación de una política lo más cercana y empática posible con los procesos comunitarios. Ha establecido mecanismos de atención, como el Programa de Promoción y Fomento de la Radiodifusión Comunitaria e Indígena (Pro-radio), que genera acciones con mesas de trabajo y apoyo rápido en situaciones de emergencia, como ocurrió con el paso y destrucción del huracán Otis.

El foro concluyó con un amplio respaldo al IFT como órgano autónomo, mismo que “no debe desaparecer” ante la reforma que se promueve desde el poder ejecutivo de eliminar la mayor parte de los organismos autónomos del Estado, y un exhorto a todas las dependencias federales a involucrarse en el tema.

El IFT es la institución reguladora, el tercero, y se requiere del apoyo y coordinación de más instituciones públicas para fortalecer el proceso de incidencia y construcción colectiva indígena y afromexicana desde organizaciones y medios comunitarios. Actualmente, solo el 1% del presupuesto anual destinado a publicidad se gasta en medios indígenas y comunitarios.

Con información de IFT, La coperacha y El Economista.  


Carlos Luján Aldana

Economista Mexicano y Analista político internacional. Africanista por convicción y pasatiempo. Colaborador esporádico en diversos medios de comunicación internacionales, impulsando el conocimiento sobre África en la opinión pública y difundiendo el acontecer económico, geopolítico y social del continente africano, así como de la población afromexicana y las relaciones multilaterales México-África.

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